Detrás de El Lobo de Wall Street.
Jordan Belfort quiso ser una estrella de rock. Tocaba la guitarra y, según su propio juicio, era increíble. Escuchaba las bandas de rock que sonaban en la radio y hacían giras por el mundo cuando él era niño y que, ahora, consideramos clásicas: Beatles, Led Zeppelin, Rolling Stones. Nada realmente sorpresivo, pero tampoco necesitaba más que a...